TARTA DE DULCE DE LECHE

En la vida se nos presentan muchos momentos dulces, ésta tarta es un homenaje a todo lo que a veces nos cuesta valorar, a las cosas no materiales que nos rodean y que, en muchas ocasiones, la costumbre hace que nos pasen desapercibidas.

Hacemos el camino mirando hacia el pasado o hacia el futuro, son pocas las ocasiones que nos paramos a pensar en las pequeñas cosas que nos producen un estado de paz, de interiorización, de comunicación con lo que nuestro cuerpo está viviendo en un momento determinado.

Damos poco valor a lo que , posiblemente, si prestáramos un poco de atención, nos percataríamos de que es un regalo para nuestros sentidos, hablo de esas pequeñas cosas a las que los Hedonistas de la antigua Grécia daban tanta importancia. Sin querer pertenecer a esa corriente filosófica, la cuál deja mucho que desear en cuanto a respetar a los demás (ya que priorizaban su propio placer por encima de cualquier persona o cosa), sí que me dejo contagiar por la parte positiva que ese modo de vivir suponía.

Lo bueno es que uno se puede provocar tantos momentos dulces como quiera (allá la imaginación de cada cual), dejar que algo se funda en nuestro paladar es uno de ellos.

Hoy os presento una tarta que, si la probáis, no os va a dejar indiferentes. Su preparación es muy fácil.

El dulce de leche siempre me ha gustado, aunque reconozco que es empalagoso. La mezcla de los ingredientes de ésta tarta hace que se note todo su sabor pero su textura no es nada pesada, entra muy suave y es un placer degustarlo. Si además le añadimos una bonita decoración, el resultado puede sorprender a más de un comensal.

INGREDIENTES:

- 450g de dulce de leche
- 400g de nata
- 500g de leche
- 2 cucharadas de azúcar moreno
- 2 sobres + 2 cucharadas de cuajada
- 200g. de queso de untar tipo Philadelphia (no se nota su sabor en la tarta)

Para decorar:

- 50 g de chocolate de repostería
- Bolitas de tres chocolates (de venta en muchos supermercados)
- Crujiente de almendras caramelizadas

PREPARACIÓN EN THERMOMIX:

1.Poner todos los ingredientes en el vaso y programar 8 min.,100º, velocidad 5 y cuando falte 1 minuto bajar la velocidad a 3 y 1/2.

2. Volcar la mezcla en un molde (preferentemente de silicona).

3. Dejar enfriar y luego conservar en el frigorífico hasta el momento de servir.

4. Decorar al gusto.

PREPARACIÓN MODO TRADICIONAL:

1.Calentar la nata, la leche y el azúcar hasta que empiece a hervir.

2.Añadir el resto de ingredientes y mezclar con unas barillas mientras se sigue calentando a fuego lento durante unos 5 minutos.

3. Pasar la mezcla por la batidora para eliminar posibles grumos.

4. Volcar la mezcla en un molde (preferentemente de silicona).

5. Dejar enfriar y luego conservar en el frigorífico hasta el momento de servir.

6. Decorar al gusto.

¡Espero que os guste!